Existen 9 tipos de personalidad:
-Tipo 1,
Perfeccionista: “Vales o eres
bueno si haces lo correcto” Es un tipo idealista de sólidos principios. Les
gusta la organización y el orden. Muy meticulosos, tienen un gran sentido de la
responsabilidad y de la justicia. Honestos y moralistas, con un fuerte sentido
del bien y del mal. Sus valores generales son la racionalidad, objetividad, tolerancia,
rectitud, sabiduría y autodisciplina, su defecto fundamental la ira, aunque se
trata de una ira muy reprimida y elaborada, transformada en crítica, exigencia
y juicio, tanto a sí mismos como a los demás. A veces tienden a sentirse superiores
al resto.
Tienen temor a equivocarse, por ello son extremadamente
críticos consigo mismo y con los demás. Son previsores, para evitar posibles
contratiempos catastróficos. No se permiten mostrar la rabia, salvo en círculos
íntimos, por lo que siempre se mostrarán racionales. Detestan ser criticados o
juzgados por los otros. Sus objetivos en la vida son respetar las reglas, ser
bueno y virtuoso. Son perfeccionistas y tienden al resentimiento.
Su mecanismo de defensa es el control de sus reacciones.
Sienten frecuentemente un gran resentimiento, pero evitarán mostrarlo, incluso
reconocerlo.
-Tipo 2, Altruista: “Vales o estás bien si eres amado.” Es
un tipo preocupado, orientado a los demás. Empáticos, complacientes, intentan
servir a los demás para ganarse su aprobación, llegando a hacer por ti más de
lo que harían por ellos mismos. Son generosos, se sienten mejor dando que
recibiendo, pero pueden llegar a manipular afectivamente a los demás para que
les reconozcan sus servicios y su entorno les vea como indispensables. Sus
valores son la empatía, la generosidad, el altruismo, la benevolencia y el aprecio,
sus defectos el orgullo o la soberbia, entendida como incapacidad de reconocer
el propio sufrimiento.
Temen por encima de todo la indigencia, mostrarse
necesitados. No obstante necesitan ser amados, aunque por lo general no lo
expresarán.
Sus objetivos en la vida son los de ayudar al prójimo, para
obtener su estima. El rechazo de los demás es interpretado como falta de valía
personal. Pueden mostrarse posesivos. Su fijación es la adulación. Como
mecanismo de defensa utilizan la represión. Son el paradigma de la falsa
abundancia. No necesitan nada de los demás, se bastan para cuidarse de sí
mismos.
-Tipo 3, Ejecutante: “Vales por lo que haces y estás bien si tienes éxito.”
Es un tipo adaptable y orientado al éxito. Muestran una gran
seguridad en sí mismo. Son personas atractivas y encantadoras, a la vez que
ambiciosas. Siempre se encuentran ocupados en mil proyectos. Trabajan fuerte y
de forma eficiente. Son competitivos, organizados y pragmáticos. Dan mucha
importancia al reconocimiento ajeno, por ello intentarán siempre causar una
buena impresión. Grandes conversadores. Como sus principales valores están la adaptibilidad,
la autoestima, la excelencia, la seguridad en sí mismo, la ambición y el
desarrollo propio, mientras que su principal defecto es la vanidad, el apego a
la propia imagen. Para este tipo tiene gran importancia la imagen. Busca la
admiración de los demás.
El fracaso es intolerable. Se siente herido si otra persona
es mejor acogida o tiene más éxito que él. Por ello, no pierde el tiempo y
trabaja duro para conseguir el respeto ajeno.
Su objetivo es sentirse valioso, triunfar, cueste lo que
cueste. Pueden usar la mentira para conseguir el éxito. Mostrará siempre su
mejor lado y sacará el mejor partido posible de sus cualidades. Su fijación es
la mentira. Utilizan la desconexión con sus emociones y sentimientos como
mecanismo de defensa, se aferrarán a la máscara, esa apariencia tan perfecta
que se han construido a los ojos de los demás.
-Tipo
4, Romántico: “Vales o
estás bien si eres fiel a ti mismo” Se siente diferente, especial, muchas
veces nostálgico. Es sensible, esteta, creativo, con un mundo interno cargado
de emociones y sentimientos. Es introspectivo y cálido. Le afectan la belleza,
el amor y el dolor. Sufren más que nadie y se sienten incomprendidos. Sus
valores son la autopercatación, la individualidad, la sensibilidad, la compasión,
la creatividad y la honestidad emocional, mientras su defecto fundamental es la
envidia, convertida en agresividad, como tendencia a compararse con los demás y
a salir perdiendo. Les cuesta reconocer sus propias virtudes y son víctimas de
una insatisfacción frecuente y una baja autoestima.
Su temor básico es la vulgaridad, necesitan sentirse
especiales, con una identidad propia. Por ello, pueden caer en la queja
frecuente, para atraer la atención de los demás. Su objetivo es el de vivir las
emociones. Como no se consideran valiosos en su proyección hacia el exterior,
se refugian en su mundo interior. De allí podrán extraer lo verdaderamente
valioso que pueden ofrecer al mundo. Su fijación es la melancolía y su
mecanismo de defensa la introyección: Si algo no funciona, se sienten
responsables. Ello da energía a su mundo emocional para sentirse vivos.
-Tipo 5, Observador: “Vales o estás bien si sabes, si eres
experto en algo.”
Es un tipo vehemente y cerebral. Intelectual, siempre se
encuentra dando explicaciones. Son perspicaces, curiosos e innovadores. Pueden
tener problemas de aislamiento, pues necesitan tomar distancia para analizar
fríamente las cosas. Juiciosos y objetivos, poco sensibles a las emociones. Sus
valores son el entendimiento, la comprensión, la introvisión, el conocimiento, la
observación penetrante y la originalidad, mientras que su defecto fundamental
es la avaricia. No les gusta depender de los demás ni de las cosas. Por ello,
generalmente son austeros para no sentirse necesitados. Ahora bien, acumularán
aquello que da sentido a su existencia y les costará compartirlo.
Aborrecen el vacío, a quedarse sin nada, pues ello les haría
dependientes de los demás y sentirse vulnerables. Evitan los compromisos
emocionales. Su objetivo en la vida es el
razonar. Ese es su punto fuerte. En el mundo de la razón se siente
seguros. En cambio la actividad social y lo emocional les desestabiliza. Su
fijación es la mezquindad y su mecanismo de defensa el aislamiento. Marcan bien
las distancias para evitar sentirse invadidos en su espacio personal e íntimo.
-Tipo
6, Escéptico: “Vales o estás bien si haces lo que se espera de ti.”
Incondicional a su círculo de amigos, representan un tipo
comprometido, orientado a la seguridad. Son personas dignas de confianza,
responsables y trabajadoras. Suelen ser cautelosas, a veces en exceso
imaginativas y sensibles a lo que no se dice. Eso las sumerge en un mar de
dudas. Cuestionan la veracidad de las cosas. Temeroso con los que no cumplen
las normas. Sus valores son
El compromiso, la lealtad, la cooperación, la fidelidad, la
dedicación y la confiabilidad, su defecto el miedo. Por ello necesita
referencias externas y desea ser leal y obediente. Le cuesta emprender cosas
nuevas por miedo a equivocarse.
Su principal temor es no tener apoyo ni orientación, ser
incapaz de sobrevivir sólo. Ello le puede llevar a la sumisión. La falta de
orientación interna puede generarles mucha ansiedad. Su objetivo en la vida ser
prudente. Para combatir el miedo, necesitan seguridad, por ello son
responsables y su vida está regida por reglas y normas. Su fijación es la duda
y su mecanismo de defensa es la proyección: Su desconfianza genérica les lleva
a proyectar hacia el exterior su propio malestar. De esta forma interpreta el
entorno como hostil.
-Tipo 7, Epicúreo: “Vales o estás bien si obtienes lo que
necesitas.” Es un entusiasta de la vida, siempre alegre y optimista. Todo
le fascina. La vida es un campo de juego. Es un tipo productivo y ajetreado.
Desinhibido no le gusta sentirse obligado y poseído. Busca amigos con quien
pueda experimentar sus múltiples proyectos. Necesita siempre experiencias
nuevas y estimulantes. Mente ágil. Pueden parecer muy superficiales e
impulsivos. Sus valores son el entusiasmo, la flexibilidad, la gratitud, el sentido
práctico,el gozo, la productividad y su defecto la gula. Su vida gira en torno
al placer. Necesita mantener abiertas todas las opciones, por lo que evitará
los compromisos.
Su temor básico es el dolor. Para no conectar con el
sufrimiento, pueden vivir en un mundo superficial e imaginario. Su permanente
optimismo y la búsqueda de nuevos objetivos le alejan del sufrimiento. Su
objetivo es disfrutar el instante. Siempre quiere sentirse feliz y satisfecho.
Cuando ha conseguido un objetivo, ya busca inmediatamente algo nuevo que le
permita evadir el problema presente. Su fijación es la planificación y su mecanismo
de defensa la racionalización. En su mente construye un mundo de proyectos
sugestivos. El sufrimiento es una experiencia emocional que intentará evitar.
Siempre sabe la solución al problema.
-Tipo 8, Jefe: “Vales o estás bien si eres fuerte y estás
al mando de la situación.” Es un tipo poderoso y dominante. Líderes natos,
se sienten seguras de sí mismas, fuertes y capaces de imponerse. Busca el
poder. Son personas protectoras, decididas y dominantes. Ponen su fuerza al
servicio de los que le rodean. Valientes y perseverantes. Honestos y directos.
Lucha por lo que considera justo. Sus valores son la Magnanimidad, confianza en
sí mismo, decisión, superioridad, valentía y protección, su defecto la lujuria,
en el sentido de vivir con intensidad todas las acciones y emociones, no sólo
en el plano sexual. Son apasionados, tanto en las situaciones placenteras como
en las que no lo son. Buscan las situaciones excitantes.
Temor básico a la debilidad. No soportan ser heridos o
dominados por los demás. Consideran que la mejor defensa es un buen ataque, por
lo que suelen mostrar una actitud intimidatoria. Su objetivo en la vida es mostrar
la fuerza. Ello puede llevar a mostrarse combativos en extremo. Su afán de
proteger sus puntos débiles, les conduce fácilmente a la discusión y a decir
que no. Su fijación es la venganza y su mecanismo de defensa: La negación. Ello
les protege de cualquier invasión y les hace sentir que controlan las riendas
de su vida.
-Tipo 9, Mediador: “Vales o
estás bien.” Tranquilos, previsibles y bondadosos. Relajados, a veces en
exceso cayendo en la pasividad e indolencia. Es un tipo acomodadizo y humilde.
Saben escuchar y ayudar a la gente. Afectuosos, complacientes y tolerantes,
pueden llegar a transigir con los demás para mantener la paz. Son buenos
mediadores por su facilidad de colocarse en la piel del otro. Sus valores son
la aceptación, el aplomo, la ecuanimidad, la receptividad y la paciencia y su
defecto la pereza. Es la resistencia a
profundizar en sí mismo, a escucharse y a elegir un camino. Deciden por
eliminación; las circunstancias deciden. Les importa que todo esté programado y
se aferran a lo que es familiar.
Temor básico: Aborrecen el conflicto. Para evitarlo,
anestesian sus necesidades y sentimientos. Minimizarán cualquier cosa
inquietante. Buscan la armonía, aún cuando ello vaya en contra de sus
necesidades. Necesita preservar la estabilidad interior y la paz mental. No
soportan la presión exterior. Su fijación es el olvido de sí y su mecanismo de
defensa la narcotización. Para evitar entrar en conflicto con los demás lo
mejor es no darse importancia y asumir como propios los criterios y opiniones
ajenas.
En breve se publicará la lista con el color y el grupo de cada uno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario